Receta de burrata di bufala
Atención: si se modifican las cantidades, el resultado de la receta puede no ser perfecto. Las cantidades, así como los tiempos de preparación y cocción de los ingredientes, no se adaptan automáticamente en el texto. Si tienes alguna duda sobre las cantidades de esta receta, los expertos en cocina de Betty Bossi estarán encantados de responderte: Taller de Cocina Betty Bossi cuisiner@bettybossi.ch
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Receta caliente de burrata
1. Quitar la cáscara a los cítricos y escaldarlos en agua. Exprimir el zumo de la fruta y mezclarlo con la piel y el azúcar en un cazo. Dejar cocer durante 40 minutos.2 Enfriar durante 4 horas, y luego disponer los platos con la mozzarella grande y las galletas.
En un bol, triturar el ajo, los piñones y las hojas de albahaca picadas. Vierta el aceite de oliva y el queso parmesano, y luego el vinagre.2.Corte el producto lácteo y los tomates en rodajas. Forma un sándwich. Poner el pesto por encima y servir con pan tostado.
Hervir el agua, el azúcar, la ralladura de limón y la albahaca picada. Mezclar la burrata, el cebollino, las nueces picadas y el aceite de oliva. Colocar la mezcla en los tomates y darles la vuelta para crear la ilusión.
Tostar los piñones y mezclarlos con el parmesano, la albahaca, el ajo y el aceite de oliva. Pasar las bolas de queso por la harina, luego por el huevo y después por el pan rallado. Calentar en el aceite de freír durante 1 minuto. Servir en platos con salsa de tomate.
Receta de pasta de burrata
Junto con el parmesano y el grana padano, la mozzarella es el queso italiano más vendido del mundo. Su hermana pequeña, la burrata, aún más suave y cremosa, lleva unos años robando el protagonismo. He aquí un retrato de familia de estos quesos ultra frescos y ultra sabrosos con un irresistible acento sureño.
La mozzarella nació en el sur de Italia, antes de extenderse desde la punta de la bota hasta las regiones centrales. Se obtiene mediante la técnica de la pasta filata, que consiste en mezclar la leche cuajada con suero antes de calentarla y estirarla. Otros quesos se elaboran con este método, como el scamorza o el provolone. Pero lo que diferencia a la mozzarella de sus variantes, como la stracciatella o la burrata, es obviamente su frescura. Las bolas o trenzas se guardan en agua salada para conservar esta cualidad y se consumen, en la medida de lo posible, a las pocas horas de su elaboración.